El acusado de amenazar con quemar el negocio de un hombre en Valdepeñas si no le daba 10.000 euros ha negado los hechos durante la primera sesión del juicio que se celebró el martes y que continuará el 12 y 13 de abril. El acusado alegó que la entrega de dinero se debía a la venta de una casa acordada entre ambos. La defensa de A.M.V. argumentó que ambos acudieron a la vivienda porque tenía una buena oferta para venderle la casa. Según la versión del acusado, la víctima entró en el baño con él y no cerró la puerta en ningún momento.

A.M.V. dijo que siempre llevó consigo la mochila y que el marco de la puerta del baño estaba roto porque su cuñado y su hermano golpearon con una lavadora la estructura. Además, argumentó que había quedado con la víctima para hacer efectiva la entrega de dinero correspondiente a la supuesta venta de la casa acordada entre ambos. Sobre la pistola que supuestamente usó para amenazar a la víctima, A.M.V. dijo que "estaba en un armario de la casa donde nadie la pudiese ver". Agregó que la pistola estaba metida en una caja de corcho y que no era real. Añadió que al verla, la víctima se puso pálido, pero que intentó tranquilizarlo.

A.M.V. declaró que habían intercambiado números de teléfono después de no haberse visto durante un tiempo. Se dijo a sí mismo que tenía una oferta para él y le mandó un WhatsApp "para venderle la casa". Alegó que durante una despedida de soltero, la víctima le contó que su padre se iba a jubilar y que él estaba en paro, por lo que pensó en solicitar trabajo en su empresa. También afirmó que cuando se encontraron en la imprenta, la víctima le propuso "tomar algo como dos conocidos del pueblo". Según la Fiscalía, el acusado remitió varios mensajes a M.C.S. el 8 de marzo de 2019, con quien había tenido una relación de amistad. Ese día, el acusado habría amenazado a la víctima.

La Fiscalía sostiene que el acusado propuso ir a su vivienda y, una vez allí, M.C.S. accedió al baño donde él le esperaba, cerrando la puerta, quitándose la riñonera que portaba e impidiendo a la víctima abrir la puerta, hasta el punto de forzar el marco, a raíz del forcejeo entre ambos. Seguidamente, el acusado sacó de su mochila una pistola simulada y tras mostrásela, solicitó 5.000 euros y un contrato de trabajo o 10.000 euros. También le dijo que le quemaría el negocio si le contaba algo a su familia o a la policía.

La Fiscalía apunta que M.C.S. salió de la vivienda y, tras solicitar 10.000 euros, se dirigió a la Estación de Servicio 'Laguna'. Sin embargo, los hechos ya habían sido denunciados con anterioridad y se montó un dispositivo de vigilancia conformado por agentes de la Policía Nacional de la Comisaría de Valdepeñas, que sobre las 16.00 horas procedieron a la detención del acusado.