TOLEDO, 18 de agosto. Durante el último fin de semana, las carreteras de Castilla-La Mancha sufrieron un repunte en los accidentes viales, dejando un total de 23 personas heridas, de las cuales cuatro presentan lesiones graves. Este alarmante balance se deriva del informe emitido por la DGT, que abarca el periodo desde las 15:00 horas del viernes hasta la medianoche del domingo.

La provincia de Toledo se ha visto particularmente afectada, acumulando la mayor cantidad de incidentes con 12 accidentes. De estos, dos personas resultaron gravemente heridas y seis más sufrieron lesiones leves. En el resto de las provincias, Guadalajara y Cuenca registraron cuatro accidentes cada una. En Guadalajara, dos de los heridos sufrieron daños graves, mientras que en Cuenca, fueron cuatro las personas con heridas leves.

Por otro lado, Albacete solo reportó un accidente, que propició un herido leve, mientras que en Ciudad Real ocurrió otro siniestro que dejó dos personas con lesiones menores.

En cuanto a las pruebas de alcoholemia, se realizaron un total de 3.716 en toda la región, resultando en 46 positivos; tres de estos casos involucraron a jóvenes menores de 25 años. Albacete contabilizó 626 pruebas, de las cuales cuatro resultaron positivas, sin ninguna incidencia entre los jóvenes; Ciudad Real llevó a cabo 720 pruebas con 11 positivos y sin casos en menores. En Cuenca, se realizaron 605 pruebas, reportando cinco positivos, uno de ellos entre jóvenes, mientras que Guadalajara examinó a 994 conductores, arrojando ocho positivos y uno en menores. Finalmente, Toledo registró 771 pruebas, con un total de 18 positivos, incluido uno en un joven menor de 25 años.