En una conmovedora historia que remarca la importancia de la protección animal, el Seprona de la Guardia Civil ha desvelado los detalles alarmantes del abandono de Ares, un perro de la raza American Staffordshire Terrier, dentro de la operación 'Ownerbad'. Este caso está siendo investigado por las autoridades, que buscan al responsable de este acto cruel contra un ser indefenso.

Lo impactante del caso es que Ares fue dejado a su suerte durante una ola de calor, expuesto a temperaturas superiores a los 30 grados, sin acceso a agua o alimento, y fuertemente atado a una viga de hierro en las inmediaciones de unas obras. Según la Guardia Civil, este deplorable estado casi le costó la vida.

Fue un obrero, con un gran amor por los animales, quien escuchó los desgarradores lamentos de Ares y logró encontrarlo en un estado crítico, incapaz de sostener su propia cabeza. Tras desatarlo, él y sus compañeros lo trasladaron a un lugar seguro y a la sombra, proporcionándole el agua que tanto necesitaba.

Al darse cuenta de la gravedad de la situación, el grupo decidió alertar a la Guardia Civil. La rápida acción de las autoridades, en colaboración con la Policía Local de Valdepeñas y Agentes de Medio Ambiente, permitió que Ares fuera trasladado a un veterinario, donde recibió atención urgente.

Después de ser evaluado y recibir los primeros auxilios, Ares fue ingresado en el Centro Municipal Canino de Valdepeñas, donde ahora se encuentra a la espera de una nueva oportunidad; una familia ya ha decidido adoptarlo, lo que promete un futuro mejor para él.

Una vez que Ares estuvo a salvo, el Seprona inició una exhaustiva investigación para identificar al autor de este delito. Con un meticuloso trabajo de recopilación de pruebas, se logró esclarecer el caso, y la documentación correspondiente se ha puesto a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Valdepeñas, dando un paso importante hacia la justicia para Ares y otros animales que sufren en condiciones similares.