En una operación llevada a cabo por la Policía Nacional, se ha detenido a tres personas en Madrid y Murcia por obligar a mujeres, principalmente captadas en Colombia, a ejercer la prostitución en clubes de alterne y en domicilios particulares.
Este grupo delictivo operaba en diversas provincias de España, como Toledo, Madrid, Murcia, Cáceres y Jaén, según ha comunicado la Policía Nacional en un comunicado.
Las mujeres, provenientes de países en situaciones vulnerables, viajaban a España con la esperanza de mejorar sus condiciones de vida. Sin embargo, al llegar eran obligadas a prostituirse para saldar la deuda acumulada por los costos del viaje.
De acuerdo con la Policía, además de la deuda inicial, las mujeres debían pagar 50 euros diarios en concepto de manutención y 300 euros mensuales por el alojamiento.
Uno de los casos más graves involucra a una víctima que sufrió dos agresiones sexuales y amenazas de muerte que la obligaron a huir de España. La investigación que condujo a estas detenciones comenzó con el testimonio de una de las mujeres explotadas.
Una vez en España, las mujeres eran trasladadas entre diferentes clubes para ejercer la prostitución, recibiendo instrucciones de los miembros del grupo sobre los servicios a ofrecer y las tarifas a cobrar. Además, se ha podido confirmar que uno de los detenidos tenía conexiones en Suiza y algunas mujeres fueron llevadas allí para ser explotadas sexualmente.
En uno de los clubes nacionales, una víctima presenció cómo dos menores eran retenidas contra su voluntad para prostituirse con "clientes especiales". Tras sufrir dos agresiones sexuales y ser amenazada de muerte, esta víctima tuvo que huir del país para salvaguardar su vida.
Es preocupante que los detenidos, que no tenían empleo remunerado, hayan enviado recientemente más de 66.500 euros al extranjero. Esto sugiere una red de explotación sexual y tráfico de personas mucho más amplia de lo que inicialmente se pensaba.
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