En Albacete, efectivos de la Patrulla del Servicio de Protección de la Naturaleza (Paprona), de la Guardia Civil de Hellín, han investigado a un vecino de una pedanía hellinera, como presunto autor de un delito de maltrato animal.

El incidente se dio a conocer a través de redes sociales, donde se informaba que un perro gravemente herido había sido encontrado en un contenedor de basuras en la pedanía de Mingogil-Hellín, dentro de un saco. El animal presentaba graves heridas en la cabeza y una fractura en una de sus patas.

Los gritos del perro llamaron la atención de una transeúnte, quien contactó a la protectora de animales hellinera 'Refugio de Sori', para que se hicieran cargo del can. Debido a la gravedad de las lesiones, el perro fue trasladado a una clínica veterinaria en Hellín, y posteriormente a la fundación de rescate de animales en la Comunidad de Madrid, donde, a pesar de los esfuerzos, lamentablemente falleció.

Tras investigar el caso, se descubrió que el perro, de raza Yorkshire Biewer y de nombre TOBI, era propiedad de un vecino de la pedanía hellinera, quien admitió haberlo atropellado accidentalmente en su patio. En lugar de brindarle atención veterinaria, lo colocó en un saco y lo arrojó a un contenedor de basura, lo que provocó la muerte del animal.

Gracias a la colaboración de la ciudadanía, se logró esclarecer este cruel acto de maltrato animal, que generó indignación en la comarca hellinera. Las autoridades han puesto las diligencias correspondientes a disposición del Juzgado de Instrucción número tres de Hellín.