SIGÜENZA (GUADALAJARA), 16 Oct.

En el marco del acto institucional por el Día de la Mujer Rural, Emiliano García-Page, presidente de Castilla-La Mancha, ha expresado su preocupación acerca de una posible ley de amnistía como una moneda de cambio para el apoyo a la investidura de Pedro Sánchez. Según García-Page, esta medida resultaría en "desigualdades" en España, cuyas consecuencias recaerán en "las próximas generaciones", por lo tanto, ha llamado a no tomarlo a la ligera.

El presidente regional ha señalado que hay quienes confunden el concepto de la amnistía, ya que algunos la plantean como una amnistía "para España". En este sentido, García-Page ha dejado claro que la igualdad entre los españoles no debe ir en detrimento de la unidad, sino que es precisamente a través de la defensa de esa unidad que se busca promover la igualdad.

En el actual "momento delicado y grave" que atraviesa el país, el presidente ha subrayado que cualquier acción que dificulte la convivencia y la unidad en España repercutirá en las próximas generaciones, incluso si la factura de estas acciones no se asuma de inmediato. García-Page ha querido dejar en claro su postura: "No sé qué ocurrirá finalmente en España, pero como presidente de esta región, sé que cuando exigimos que los ciudadanos de mi tierra tengan la capacidad de opinar en igualdad de condiciones, estamos cumpliendo con nuestra responsabilidad".