TOLEDO, 1 de diciembre. En un giro polémico de los acontecimientos, el presidente del Partido Popular en Castilla-La Mancha, Paco Núñez, expresó este domingo su fuerte desacuerdo con la actuación del presidente regional, Emiliano García-Page, durante el reciente Congreso Federal del PSOE. Núñez no dudó en calificar de “ridículo” el desempeño de Page al asumir en su intervención la propuesta de “bilateralidad” que impulsa Pedro Sánchez en el debate sobre financiación autonómica.

Desde Valladolid, donde participaba en la 27 Intermunicipal del Partido Popular, Núñez criticó con dureza el enfoque que adoptó el presidente regional, asegurando que los socialistas de Castilla-La Mancha han cometido un error al presentar el documento de financiación como un triunfo. Según él, han intentado vender la inclusión del concepto de multilateralidad en la negociación como un éxito, a pesar de que el texto final, según su análisis, se encuentra firmemente alineado con la bilateralidad promovida por Sánchez.

En contraste, Núñez destacó la fortaleza del Partido Popular a nivel local, mencionando la buena gestión y la transparencia que caracterizan a sus gobiernos municipales, tal como ha comunicado el PP en un comunicado de prensa.

El líder popular no escatimó en críticas hacia el Partido Socialista, sugiriendo que bajo el liderazgo de García-Page, el PSOE ha ignorado asuntos fundamentales para la región. “El Partido Socialista ha llegado a Sevilla sin un verdadero compromiso por Castilla-La Mancha”, declaró Núñez, cuestionando la eficacia de la representación política de Page.

Más allá de las críticas, Núñez fue contundente al afirmar que el presidente regional carece de la determinación necesaria para desafiar a Sánchez en cuestiones cruciales como la gestión del agua. En su opinión, esta falta de confrontación debilita a la región y la somete a más “sanchismo”, con Page y el PSOE como cómplices. “Castilla-La Mancha va a tener que soportar más decisiones unilaterales que no benefician a la gente”, concluyó Núñez, insistiendo en que las palabras son insuficientes si posteriormente se valida la agenda de Sánchez en las votaciones.