CUENCA, 9 de enero. En un nuevo capítulo de la controversia sobre el ferrocarril convencional, el líder del Partido Popular en Castilla-La Mancha, Paco Núñez, ha exigido que se materialicen las inversiones prometidas para Cuenca tras la decisión del Gobierno de España de suprimir la línea Tarancón-Cuenca-Utiel. A su juicio, el gobierno central no revertirá su postura, lo que hace aún más necesario que se cumplan los compromisos adquiridos.

Durante una reciente visita a la ciudad, Núñez respondió a las preguntas de los periodistas afirmando que, aunque el PP defendió la continuidad del ferrocarril, lamenta que las administraciones socialistas, tanto a nivel local como regional, decidieran en contra. Para el presidente del PP, la prioridad ahora es reclamar al Ministerio de Transportes las inversiones necesarias que se habían prometido para la modernización de Cuenca, un tema en el que su partido está decidido a luchar con vehemencia.

En relación a la situación actual de los presupuestos de Castilla-La Mancha, Núñez denunció la falta de actuaciones para este propósito y la ausencia de declaraciones por parte de Adif. Aseguró que los 'populares' estarán vigilantes ante cualquier desarrollo en los Presupuestos Generales del Estado que pueda afectar a la situación de Cuenca.

Frente a la pregunta de si considera que la lucha por la restauración del ferrocarril convencional es una causa perdida, el dirigente popular reitera su compromiso con los pueblos de Cuenca, afirmando que no se puede permitir que la provincia sufra la pérdida constante de servicios sin recibir compensaciones adecuadas. A su parecer, una vez que se decide retirar un servicio indispensable como el ferrocarril, es fundamental que se cumplan las promesas de inversión que vendrían de la mano de esa decisión.

Núñez realizó estas declaraciones en la Plaza de España, acompañado por concejales del Grupo Municipal del PP, quienes le expusieron diversas problemáticas que afectan al centro de Cuenca. Uno de los temas más preocupantes fue el abandono del edificio del mercado, que se encuentra en un estado ruinoso tras la pérdida de una subvención europea destinada a su rehabilitación, así como la falta de fondos para la remodelación de Carretería.

El presidente del PP también sacó a relucir la frustración acumulada durante una década de promesas no cumplidas por parte de Fernando García-Page, y recalcó que durante el último debate presupuestario, su partido propuso inversiones cruciales para Cuenca, entre ellas, la autovía Cuenca-Albacete y la revitalización de la zona comercial de la ciudad.

Respecto a la situación de Carretería, Núñez cuestionó cómo es posible que el presidente de la Junta prometa una significativa inversión en verano, para luego presentar unos presupuestos donde no hay ni un euro destinado a esa causa. “¿Cómo es eso posible?”, se preguntó mientras destacaba la incoherencia entre las promesas y los hechos.

Asimismo, el líder de los 'populares' lamentó la negativa del gobierno regional y del PSOE a enmiendas propuestas por su partido para mejorar la situación de Cuenca, enfatizando que estas enmiendas atendían a compromisos que el propio presidente de la Junta había asumido anteriormente.

Por otra parte, Núñez criticó la falta de acción del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, al no convocar a los grupos parlamentarios para discutir una resolución de apoyo al pueblo venezolano en un pleno extraordinario. Hizo hincapié en la necesidad de posicionarse ante la inminente toma de posesión de Nicolás Maduro, un dirigente al que acusó de usar tácticas dictatoriales para perpetuarse en el poder, subrayando que el verdadero presidente electo, según la voluntad popular, es Edmundo González.

Finalmente, Núñez expresó su pesar por no haber escuchado una condena clara por parte del gobierno regional en defensa de la democracia y la libertad en Venezuela, sugiriendo que tal vez este silencio se deba a relaciones políticas con el expresidente Zapatero o al pacto que Page pueda tener con Sánchez en el contexto nacional.