CIUDAD REAL, 17 Mar.

Un millar de personas se reunieron el sábado 16 de marzo en el Pabellón Vicente Paniagua de Alcázar de San Juan, para participar en la XIV edición del prestigioso concurso '1.000 no se equivocan' con el objetivo de elegir los mejores vinos de la región.

En esta ocasión, se presentaron seis categorías de vinos diferentes, que abarcaban desde blancos y rosados hasta tintos jóvenes, tintos con barrica, tintos envejecidos y vinos espumosos.

Los catadores, provenientes no solo de Alcázar de San Juan, sino de toda la región y del resto del país, tuvieron la oportunidad de degustar hasta diez vinos de distintas categorías, todos ellos con Denominación de Origen, Vinos de la Tierra de Castilla o Vinos de Pago.

La alcaldesa, Rosa Melchor, expresó su agradecimiento a todos los trabajadores que hicieron posible este evento, afirmando que se logró atraer a 70 bodegas participantes con más de 200 vinos, incluyendo la participación de todas las Denominaciones de Origen de la región.

Destacó el crecimiento del interés por parte de mujeres y jóvenes en este evento, que ha logrado convertirse en una celebración de la vida, la música y el vino en Alcázar de San Juan, atrayendo a consumidores responsables de todas las edades.

Por su parte, la vicepresidenta de la Diputación, Sonia González, subrayó la importancia de apoyar la promoción del vino, contando con la presencia de todas las instituciones para respaldar este tipo de iniciativas que reúnen a un amplio público en torno a esta bebida.

El Director General de Agricultura de la Junta de Comunidades, Jesús Fernández Clemente, resaltó la importancia de utilizar el vino como elemento cultural y gastronómico de unión, enfatizando el apoyo continuo que la Junta brinda a los agricultores de la región.

El jurado, compuesto por mil personas, representó una mezcla diversa de amantes del vino con nociones básicas de degustación y profesionales del sector, como sumilleres, restauradores, distribuidores, enólogos y periodistas especializados, con el objetivo de reconocer la calidad de los vinos de Castilla-La Mancha.

Este concurso busca promover la cultura del vino y premiar a aquellos vinos que mejor se adaptan al gusto del consumidor, siendo un escaparate perfecto para la variedad vitivinícola de la región.

Además de la competencia, Alcázar de San Juan ofreció actividades gastronómicas y culturales adicionales durante el fin de semana, como catas en bodegas locales, molienda tradicional en el complejo molinar y visitas gratuitas a museos locales, creando una experiencia enriquecedora para residentes y turistas por igual.