GUADALAJARA, 6 de noviembre.

El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha manifestado su preocupación por las implicaciones que la reciente victoria del republicano Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos podría tener para la estabilidad global y la convivencia entre naciones. Durante una intervención desde Villel de Mesa, una localidad de Guadalajara afectada por las recientes inundaciones, García-Page señaló que esta situación podría traer consigo serias dificultades económicas a nivel mundial, afirmando: "Ojalá y me equivoque. Deseo a conciencia equivocarme".

El presidente explicó que, en el contexto de cualquier elección, siempre es necesario felicitar al ganador cuando el resultado es claro y definitivo. Sin embargo, también trajo a colación un interesante fenómeno que podría surgir con la presidencia de Trump: "Probablemente a Trump le pase una cosa que no suele suceder. La gente, a los políticos, nos piden que cumplamos nuestras promesas. Pero en este caso, la mayoría de las personas lo que realmente desea es que Trump no cumpla las promesas que ha hecho. Es una paradoja llamativa, pero es cierto que muchos no están tan preocupados por lo que hará, sino por lo que querrían que dejara de hacer".

En comparación con el proceso electoral estadounidense, García-Page afirmó que España posee un sistema democrático robusto que no tiene nada que envidiar. El presidente se refirió a cómo se llevan a cabo los discursos, mensajes y el conjunto de influencias electorales en EE.UU., sugiriendo que la dinámica política española es más honorable en este aspecto.

Asimismo, expresó su esperanza de que el país evite los problemas de manipulación y desinformación que han caracterizado las campañas en Estados Unidos en los últimos años. "No solo en la presente elección, sino en aquellas anteriores, hemos visto una serie de manipulaciones que confío en que no nos alcancen", agregó el líder socialista.

En conclusión, García-Page reiteró su advertencia sobre las dificultades que podrían surgir tanto para Europa como para el mundo en general, afirmando que "vienen curvas". Con una clara expresión de inquietud, enfatizó que la estabilidad, la convivencia y la previsibilidad económica están en riesgo: "Ojalá, ojalá y me equivoque. Deseo a conciencia equivocarme".