La operación Rantai-Denove ha concluido con la desarticulación de una banda delictiva y la detención de 12 de sus integrantes, de los cuales 4 han sido enviados a prisión. Estos criminales operaban principalmente en la provincia de Toledo, según informaron la delegada del Gobierno de España en Castilla-La Mancha, Milagros Tolón, y el coronel jefe de la Comandancia de Toledo, Francisco Javier Vélez, durante una rueda de prensa en la ciudad.
El trabajo se llevó a cabo en dos etapas a partir de diciembre de 2023, logrando esclarecer un total de 109 hechos delictivos en las provincias de Toledo, Ciudad Real, Cuenca, Madrid y Cáceres. La mayoría de los delitos imputados al grupo estaban relacionados con robos con fuerza, sumando un total de 59, además de falsificación, encubrimiento, tenencia ilícita de armas, delitos contra la salud pública y pertenencia a grupo criminal.
Los robos con fuerza se perpetraron en su mayoría en estancos, bares y restaurantes, así como en otros comercios y empresas. La delegada del Gobierno expresó su gratitud por el arduo trabajo realizado por las unidades de la Guardia Civil involucradas en esta operación, resaltando que Toledo es una provincia segura y que España es uno de los países más seguros del mundo.
Por su parte, el coronel Vélez destacó la relevancia de la operación, que había generado alarma social en la comarca de Torrijos. Los detenidos, de entre 19 y 47 años y de diversas nacionalidades, utilizaban herramientas pesadas para forzar puertas y ventanas, así como vehículos de alta gama robados para desplazarse, incluso embistiendo a las autoridades o víctimas en algunos casos.
La investigación se inició tras robos en estancos de Polán y La Puebla de Montalbán (Toledo), así como en una droguería de Pantoja. Los delincuentes lograron sustraer más de 30.000 euros en efectivo y diversos productos en estos asaltos, implicándolos también en otros robos en empresas de Toledo, incluyendo una empresa cárnica y una óptica de la cual se llevaron gafas valoradas en más de 20.000 euros.
En enero, algunos miembros del grupo perpetraron un robo con violencia en una sucursal bancaria en El Casar de Escalona (Toledo), utilizando armas de fuego cortas para intimidar al personal y llevarse más de 11.000 euros en efectivo. En los registros realizados se encontraron objetos relacionados con los hechos delictivos, una máquina para fabricar matrículas falsas, armas de fuego y plantaciones de marihuana.
Posteriormente, tras ser liberados, los criminales se unieron a otro grupo más especializado para cometer más de 40 robos en estancos y establecimientos de hostelería, en una frecuencia casi diaria durante dos meses. La segunda fase de la operación permitió recuperar cajetillas de tabaco, vehículos, armas de fuego, joyas valiosas y herramientas utilizadas en los robos.
En definitiva, se han esclarecido un total de 109 delitos en la provincia de Toledo y áreas circundantes. Para llevar a cabo esta operación, se contó con la colaboración del grupo de delitos contra el patrimonio de la UOPJ de Toledo, del Equipo ROCA, unidades caninas del Servicio Cinológico, y el destacamento de Fiscal y equipo Pegaso, todos de la Comandancia de Toledo.
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