En el Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha de este miércoles se han aprobado importantes medidas en relación al Servicio Público de Productos de Apoyo para la atención a la Dependencia. Con una inversión de 9,4 millones de euros, se busca mejorar la calidad de vida de las 3.301 personas que actualmente se benefician de este servicio, el cual incluye 5.073 productos.

La consejera de Bienestar Social ha expresado la ambiciosa meta de duplicar tanto la cantidad de productos de apoyo como el número de beneficiarios en los próximos cinco años. El objetivo es llegar a 6.000 usuarios y 10.000 productos, con la finalidad de permitir que las personas dependientes puedan permanecer en sus hogares el mayor tiempo posible.

Entre los productos que se distribuyen se encuentran grúas, sillas de ruedas, salva escaleras, somieres articulados y colchones antiescaras, todo con el propósito de facilitar las actividades diarias de quienes se encuentran en situación de dependencia, así como de asistir a los cuidadores.

Además del suministro gratuito de estos enseres y su mantenimiento, la consejera resaltó la importancia de ofrecer formación a los cuidadores sobre su uso adecuado.

En cuanto al perfil de los usuarios que se benefician de este servicio, se destaca que un 62% poseen un grado III de dependencia, un 25% un grado II y un 12% un grado I, según informó García Torijano en la comparecencia ante los medios.