En un contexto internacional marcado por tensiones y agendas políticas, el secretario general de la UGT, Pepe Álvarez, ha expresado su agradecimiento hacia el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, por rechazar los ataques dirigidos al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y a su esposa por parte del presidente de Argentina, Javier Milei. Este último, que recientemente se había reunido con representantes del empresariado español, generó controversia al realizar dichas declaraciones.

Álvarez hizo hincapié en que el verdadero foco debería estar en Milei, argumentando que la foto del presidente de Argentina con la CEOE no representa fielmente al empresariado español. Según explicó el dirigente sindical, la embajada argentina organizó la reunión con personas que tienen intereses en dicho país, lo que desencadenó el encuentro en cuestión.

Además, destacó las declaraciones del presidente de la CEOE, en las que se distinguía entre los intereses empresariales y las cuestiones políticas, agradeciendo la claridad con la que se había expresado al respecto. En este sentido, subrayó la importancia de mantener el respeto hacia la política española y el Gobierno, sin permitir que actitudes despectivas mancillen el diálogo democrático.

En su crítica a las provocaciones de Milei, Álvarez hizo un llamado a defender los valores democráticos en España, Europa y en el mundo en general, señalando la distancia entre la ideología de ciertos actores y los principios fundamentales de la democracia occidental. Asimismo, citó el posicionamiento de la patronal alemana como ejemplo de rechazo al fascismo y a la amenaza que representa para la sociedad contemporánea.

Finalmente, el líder sindical expresó su solidaridad con los sindicatos argentinos, reconociendo las dificultades y la pobreza extrema que enfrentan en la actualidad. Ante las propuestas económicas de Milei, pronosticó un empeoramiento de la situación para la mayoría de la población argentina, lo que demanda una mayor atención y compromiso por parte de la comunidad internacional.

Estas declaraciones tuvieron lugar en Cuenca, donde Pepe Álvarez participó en un curso de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (Uimp) sobre fenómenos interempresariales en las relaciones laborales, organizado por el sindicato, el Consejo General del Poder Judicial y la universidad.